Los registros relativos a los relámpagos deben contener información sobre el tipo, la intensidad, la frecuencia de las descargas y el rango acimutal en el que se observan. También debe anotarse el lapso de tiempo transcurrido entre el relámpago y el trueno. Debe prestarse atención para no confundir el relámpago con su posible reflexión en las nubes o calima. En el caso del fuego de San Telmo, debe determinarse si el fenómeno aparece en una nube, en precipitación, en aire claro, etc. Las auroras polares excepcionales deben describirse con detalle y, si es posible, acompañarse de imágenes de secuencias de lapso de tiempo o de vídeos.